36 noviembres para 37
-
Noviembre no siempre huele a lluvia, a hojas caídas, a viento que desordena
las ropas y las manda a volar muy lejos. Noviembre, mes de los rojos y
amarillo...
- Back to Home »
- CISPA , internet , medios de comunicación , periodismo , periodismo digital , redes sociales , SOPA »
- Lucha y dominación en la web: Eludiendo los espejismos de las primaveras
Posted by : Unknown
martes, 23 de abril de 2013
(Artículo
para tema Retos del Periodismo Digital. La Web como escenario de lucha y dominación cultural
del diplomado online Periodismo 3.0. Retos y oportunidades en la Era del Acceso)
“Si Martí tuviese hoy dieciséis años, digamos, sería sin discusión un bloguero, un facebuquero, un twittero” dijo Ignacio Ramonet para escandalizar a los más
timoratos pero no cabe dudas que fue manera de ejemplificar la genialidad del
Apóstol de Cuba y al mismo tiempo el poder de seducción de tecnologías
inimaginables en el pasado cercano. Aunque siempre queda la duda de hasta dónde
realmente llegó la liberación informativa que nos promete la Internet.
¿Quiénes mueven los hilos?
El brillo de los
artilugios por momentos nos pierde las esencias de quienes modulan los
contenidos en la red pues cada vez es más cierto que los sueños liberales de libertad de la
información solo quedan para los libros escolares.
La
sobreabundancia de información es la censura de la contemporaneidad. Y si con
el tiempo a alguien se le olvidó que la prensa moderna nació como un negocio
que en vez de zapatos o vestidos vende noticia, ahora es mucho más claro por
las prioridades para establecer a una noticia como relevante en la llamada red
de redes.
Ignacio Ramonet
en su más reciente entrega La explosión
del Periodismo asegura que “hoy los medios de comunicación, acorralados,
tienden a responder únicamente en términos de audiencia. Una buena noticia es
aquella que puede interesar al mayor número de personas. No aquella que, por
ejemplo, es más útil para la población, más decisiva o más esclarecedora en
materia de economía, de ecología, de política…”[1]
Visto así parece
como algo nuevo y en propiedad lo que está ocurriendo con la avalancha
tecnológica de los últimos 20 años es que el sistema mediático global está
simplemente, quitándose el ropaje
romántico, si se quiere, que le colocaron quienes aspiraban a mejorar al
capitalismo a fuerza de campaña moralizadoras.
Dentro de esos
preceptos son previsibles las prácticas monopólicas de las grandes empresas para
controlar los flujos informativos globales, también en los espacios virtuales. “De
entre los doscientos sitios web de información online más visitados de Estados
Unidos, los medios tradicionales representan un 67 por ciento del tráfico” y
“el 80 por ciento de los enlaces que encontramos en las webs informativas, los
blogs o las redes sociales norteamericanos remiten a medios de comunicación
tradicionales”[2],
dice Ramonet. De manera que los contenidos no son tan diversos como parece.
Tomemos como
referencia a Google News[3], por mucho el portal de noticias más
popular entre las audiencias internacionales. Mediante sus rastreos periódicos el buscador del cual se nutre establece,
primero aquellos sitios cuyos contenidos son nuevos con respecto al anterior
examen, agrupándolos por categorías y áreas geográficas. Así, teniendo un
material que permanece intacto en el tiempo potencialmente perderá importancia
para el robot.
Ahora bien ¿cuál
es el criterio para “rankear” un tema o historia, según Google? Es literalmente la repercusión que esta tenga en el
conjunto de medios. O sea que cuantos más medios la aborden ya da por sentado
que es importante; lo cual obviamente es una verdad a medias pues es sabido que
los grandes circuitos mediáticos son expertos censurando, por “olvido
voluntario” los grandes temas que le puedan ser espinosos a los grupos de
poder. Los estudios anuales que hace el Proyecto
Censurado son la mejor prueba de esto.
Llegado a este
punto ¿Cómo este “seleccionador”, clasifica los diferentes artículos que publicados sobre una misma historia? Mediante
cuatro juicios básicos: Fresco o nuevo
(lo reciente, original tendrá prioridad por encima de la sátira o el comunicado
de prensa). Duplicación y detección de la
novedad (Si un sitio es el primero en publicarlo y luego otros lo dan como
fuente, tendrá una mejor oportunidad de aparecer antes). Relevancia local (los medios que diariamente hablan de una misma
localidad, tendrán más probabilidades de ser considerados una fuente más
relevante cuando algo noticiable ocurra allí). Fuentes de confianza (La confianza se genera en base a los datos
históricos que tenga Google sobre un
sitio web. Información que se clasifica por categorías). Digamos si un diario
informa sobre un equipo deportivo determinado con regularidad, tendrá más
opciones de ser seleccionado como la fuente más confiable por encima de otros
que lo hagan eventualmente.
Nótese como una
historia podrá tener toda la relevancia, ecológica, política y económica que
podríamos soñar que si no es atendida por un número apreciable de órganos de
prensa, será totalmente dejada a un lado por el buscador. Por tanto estar
arriba en Google News puede ser útil
y hasta objeto de elogios pero siempre habrá que preguntarse las razones por
las cuales eso está ocurriendo. ¿será por la calidad de las noticias publicadas?,
¿por el tema abordado? ¿porque somos la
única fuente que trata esos hechos?, o porque tuvimos “la suerte” estar en el
momento adecuado.
Paralelamente Google está haciendo todo lo posible para que su
opción de red social Google Plus (+) gane
popularidad entre los internautas. Según sondeos realizados desde finales del
2012 esta ascendiendo como la herramienta principal para las acciones más
comunes en dichas redes a saber: Subir, y/o compartir fotos propias o ajenas,
comentar las actividades diarias o los post de los amigos, compartir vínculos
de blogs o ver videos creados por otros internautas.[4]
Algunas de las probables
razones para tan meteórico ascenso, dice un analista es que “Plus está
totalmente integrado todos los servicios de Google, incluyendo el crucial buscador (el cual es usado por el 83
por ciento de todos los internautas) y Youtube
la
tercera plataforma social del mundo”. Además indica, “incluir todas las cuentasde los usuarios, especialmente los de Gmailles dio una ventaja inicial importante”, a lo cual se agrega su profundaintegración con Android los estaríacolocando a la cabeza dentro del mercado de los teléfonos inteligentes; portanto predice “Google+ tendrá un rolmucho más significativo entre los usuarios de Android”.[5]
Con los llamados
tred topics (TTs) de Twitter ocurre algo parecido. Todavía
no está claro cuáles son los mecanismos de selección establecidos por sus
administradores. Pero sí es evidente que no es estrictamente lo más popular, en
el sentido cuantitativo de la palabra pues como denunciara hace poco el
bloguero brasileño Eduardo Guimaraes “herramientas como Topsy.com, que miden lacantidad de mensajes y la repetición de palabras clave a menudo demuestra quelos textos con sólo 800 puestos se llevó a TTs, mientras que otros competidoresno llegan mismo con más de 80mil mensajes y RTs (retweets)”.[6]
Pero los
propósitos de control sobre la red discurren por otros caminos como son los intentos
de establecer ataduras más fuertes bajo el manto de la lucha contra la
piratería o el ciberterrorismo.
De acuerdo con
la informaciones aparecidas a principios de enero de 2012, CBS Interactive, la división de CBS encargada de ofrecer servicios en la web, habría comprado en 2008 a CNET Networks una firma fundada en 1994 por Halsey Minor y Bonnie
Shelby, especializada en publicar artículos de noticias, blogs y podcasts sobre
tecnología y electrónica de consumo.
Sucede que CNET
es a su vez la propietaria de www.download.com que ofrece la descargar gratis
de música y programas. En 2008
a este sitio web
se le registraron 113 millones de visitantes.
O sea que tendríamos a uno de los “enemigos”
de la piratería controlando un sitio justamente de ese tipo. “La estrategia que
estas empresas han tomado –comentó el blog Guerradeconocimiento- es la de crear el problema (Piratería)
lanzando el anzuelo (páginas para descargar archivos piratas) para luego quejarse de la piratería y poder
controlar el internet”.
A finales de
febrero se supo además de la resurrección en EE.UU del proyecto de la ley deIntercambio y Protección de Información de Inteligencia Cibernética (CISPA) queel año pasado fue aprobado por la Cámara de Representantes pero rechazado por el Senado enagosto.
Durante los
debate de abril el activista de Internet Aaron Swartz le dijo al canal Rusia Today que “[La
CISPA ] realmente no supone ninguna protección contra las
amenazas cibernéticas, y todo lo que hace es obligar a la gente a compartir su
información. Pero eso no va a resolver el problema. Lo que va a resolver el
problema son las medidas reales de seguridad, que protejan al servicio en
primer lugar, y no que se espíe a la gente".
En aquel momento
Jason Miller, reportero de Federal News
Radio, advirtió que incluso la Administración Obama
podía mediante decretos presidenciales echar andar unos de los principales mecanismos
punitivos de CISPA: el Consejo de Seguridad Cibernética bajo la batuta del
Departamento de Seguridad Nacional, pero en el cual también participarían
representantes de los Departamentos de Comercio, Energía y Justicia, además de
un delegado de la Oficina
Nacional de Inteligencia.
De hecho los
principales proveedores de los servicios de info-comunicaciones dentro de EEUU
(por ejemplo AT&T, Facebook, IBM, Intel, Lockheed Martin, Microsoft National Cable & Telecommunications Association, Oracle, Symantec y Verizon) ya
manifestaron su consentimiento para brindar toda la información que el Gobierno
requiera a instancia de esta ley.
Así “el supuesto
igualitarismo democratizador de las redes sociales – como dice Pascual Serrano-
ha tenido, no se puede negar, elementos positivos, como el fin del oligopolio
de la agenda y la selección informativa de los grandes medios, pero también
tiene su cara negativa. Se trata de la ausencia de brújula que nos oriente para
distinguir lo valioso de lo irrelevante, lo riguroso del rumor, lo verdadero de
lo falso, el especialista del improvisador, el análisis del brillante del
comentario de bar”.[7]
Por otro lado
está la censura deliberada a determinadas aplicaciones de lo cual los cubanos
sabemos mucho y precisamente no desde el lado del gobierno sino desde los
proveedores gratuitos como el propio Google.
Así nos ocurrió en 2011 cuando tras promover en diversos foros las “bondades”de Google Analytics como herramientapara evaluar las estadísticas de los sitios web, sus dueños la bloquearon y nosdejaron literalmente “colgados” de la brocha.
Por eso sigue
siendo un riesgo pensar que en Internet “se vive la democracia en directo,
cuando sólo es una democracia virtual. Internet no es más que la continuación
de la utopía de querer hablar directamente con todo el mundo; el problema es
pensar que eso va a resolver nuestros problemas reales”. [8]
Addidas no me usa yo estoy
usando Addidas…
Dice Calle 13 en
una canción haciendo notar un punto que bien podría extrapolarse a cómo se asume
el tema de la preponderancia que puedan tener las redes sociales en los cambios
sociales.
En un extremo
podrían ubicarse los ciberfetichistas que al decir del investigador y bloguero
Iroel Sánchez le atribuyen la capacidad de por sí mismas la capacidad de
compulsar las revoluciones como la llamada Primavera Árabe de inicios de 2011.
“Lo que pasó en
Egipto –dice Iroel- no se produjo porque 21 por ciento de los egipcios goza de
acceso a Internet, sino porque detrás del movimiento hubo sindicatos y otras
organizaciones. Algo distinto pasa con Occupy, incapaz de sostenerse en el
tiempo. En Chile, Camila Vallejo tiene cuatrocientos mil seguidores en Twitter
pero la respalda una Federación de estudiantes con una organización, asambleas
y capacidad de movilización real para llenar las calles. No quiere decir que
las nuevas tecnologías no sean útiles; en Venezuela se ha potenciado que las
bases que apoyan el proceso bolivariano usen las redes, se ha invertido en
tecnologías que posibiliten el acceso de los sectores más humildes, tanto para
el conocimiento como en la lucha política, así se ha facilitado, por ejemplo,
que los seguidores de Chávez sin acceso a Internet en el móvil puedan seguir su
cuenta en Twitter a través de SMS”.[9]
Por su parte Juan
Fernández, asesor en el Ministerio de Comunicaciones y profesor adjunto en la Universidad de las
Ciencias Informáticas (UCI) de Cuba opina que Internet “permite intercambiar
opiniones, hacer política, sociabilizar; sin embargo, ¿esto representa de
verdad a los movimientos sociales? Depende. Por ejemplo, recientemente pusieron
por la televisión un documental muy interesante sobre campesinos hondureños que
luchan contra los terratenientes, pueden utilizar Internet en algún momento
para divulgar sus demandas, mas yo dudo que se dediquen a participar en redes
sociales, a mandar emails, cuando los están moliendo a palos”.[10]
“Más volúmenes de información –insiste- no
equivalen a mayor desarrollo cultural. De acuerdo con numerosos especialistas,
aunque en Internet hallamos cosas interesantísimas, el que en ella cualquier
persona ponga a circular sus ideas conspira contra el nivel cualitativo de lo
que se publica.”[11]
Desde el punto de vista de Pascual Serrano: “Unas
redes firmes, sólidas y duraderas requieren personas que se encuentren
físicamente en el mundo real, que se enfrenten a situaciones de la vida real en
lugares físicos, cara a cara, que discutan sobre problemas comunes, objetivos y
planes de acción. Todo ello sin la mediación de máquinas. Las redes sociales y
el mundo virtual han socavado el histórico derecho de reunión y lo han
sustituido por un hecho social alucinatorio: la falsa conciencia de reunión, la
‘ilusión de reunión”. [12]
Opciones a la criolla
Probablemente
uno de los lugares donde el relativismo de los alcances de las redes sociales
virtuales y en general las tecnologías a estas asociadas es precisamente en
Cuba. Las estimaciones más optimistas indican que apenas el 15 por ciento de los
cubanos usa Internet; pero con la importante salvedad de que en este Archipiélago
sus influencias son particularísimas pues no es la única
plataforma digital de socialización existente. Lo son también el teléfono móvil,
la memoria flash, la cámara fotográfica. Si no que le pregunten a la próspera
industria de la música pirata o los
audiovisiales bajados con antenas ilegales o los potenciales impactos que ya
está teniendo la señal abierta de Telesur
en los hogares cubanos.
No en balde
Milena Recio profesora de periodismo digital en la Facultad de Comunicación
de la Universidad
de la Habana
sostiene que “en la actualidad, y tomo en cuenta también el contexto específico
de Cuba, la desconexión absoluta no existe; de una u otra manera el hecho de la
conectividad y los flujos de información digitales transforma nuestras circunstancias.
Internet modela, modifica, conforma las maneras en que somos, incluso a nivel
individual”. [13]
Por la misma
cuerda Rosa Miriam Elizalde está convencida de que “a partir de ella la vida no es la misma, a
la realidad cotidiana se le ha agregado otro escenario, el del mundo virtual, y
eso es importante comprenderlo, sobre todo si queremos entendernos con los
jóvenes”[14]. Concretamente
esos “cinco millones de cubanos nacidos después de 1980, que han vivido en la
franja de lo que los teóricos llaman ‘nativos digitales’, en estrecha relación
con la ‘ecología digital’; ha habido un cambio generacional no convencional,
una relevante transformación evolutiva”[15].
La investigadora
describe como “se ha producido una adaptación evolutiva en el uso de las
plataformas digitales. Ante las limitaciones del acceso a la web, los muchachos
se pasan todo tipo de información por celulares y memorias flash, juegan en
redes locales adaptadas con los sistemas inalámbricos de las computadoras o
chatean aprovechando el Bluetooth de sus celulares. Están floreciendo también
gracias a mecanismos de mercado con regulaciones propias, que parecen dirimirse
en un vacío ideológico e institucional”.[16]
Entonces el ciberperiodismo no puede
desentenderse de la calle; esa que vive en el papel de los semanarios. Como
tampoco puede ser que la modulación de las políticas informativas siga teniendo
un doble camino cuando el futuro dice que más temprano que tarde las audiencias
serán las mismas.
Puede incluso que
ya estemos asistiendo a una lenta y, dispar todavía, evolución de las
audiencias. Si bien aún se ve a la
Internet como “el espacio donde localizar cualquier tipo de
información –por más especializada, absurda, lejana, extravagante que pudiera
parecer-, un servidor de correo gratis, la oportunidad de consultar alguna
prensa extranjera en su versión digital… y nada más.”[17] Ahora aquellas
estaría creando sus propias dinámicas de consumo digital de noticias y no sería
raro pensar que los blogs podrían estar tendiendo un rol comparativamente mayor
que en años anteriores.
Así, continúa
diciendo Disamis Arcia “esta llamada blogosfera cubana, con sus luces y
sombras, se ha convertido en un espacio necesario y atractivo dentro de mi
esfera de interacción y también en una vía enriquecedora de conocimiento en la
que pongo a debate mis propias concepciones e ideas a veces preconcebidas, y
creo que eso no me sucede solo a mí; como tampoco creo que los blogueros estén
totalmente conscientes del efecto que vienen ejerciendo ni del alcance que va
teniendo en su conjunto la sola existencia de múltiples maneras de ver la
realidad, de asumir las soluciones a los problemas, o de nutrir el espíritu,
que desde la perspectiva de la “big picture” conforma una rica sinfonía.”[18]
Dichas
afirmaciones no hacen otra cosa sino confirmar que lo
dicho sigue marcando la diferencia justamente allí donde las tecnologías
parecen ir a la saga pues a fin de cuentas por más que se cambien los canales eso no significa que habrán mejores un
contenido.
[1] Ignacio
Ramonet. La explosión del periodismo. p_12
Editorial José Martí, Cuba con licencia de Clave Intelectual. España
2001.
[2] Ignacio
Ramonet, ob cit.
[3] Al
respecto Pascual Serrano alerta sobre el poderío de Google, “que cotiza en el Nasdaq y es propietario, entre otras
empresas y servicios, de Youtube y de Motorola Mobility. Entre sus accionistas,
junto a los fundadores Sergey Brin y Larry Page, se encuentra Eric Schmidt,
miembro del Club Bilderberg, fue el presidente y director general de Google
hasta abril de 2011. También Ram Shriram, antes directivo de Netscape y de
Amazon. Entre los inversores institucionales, básicamente se encuentran grandes
fondos de inversión de capital riesgo como FMR LLC, The Vanguard Group, Inc.,
State Street Corporation y otros más.” Véase La batalla de la izquierda y las redes sociales En_ http://lapupilainsomne.wordpress.com/2013/02/13/la-batalla-de-la-izquierda-y-las-redes-sociales/
[4] Véase Google+ In Depth En_ http://globalwebindex.net/thinking/google-in-depth/
Posted on January 28, 2013.
[5] Véase Google+ In Depth En_ http://globalwebindex.net/thinking/google-in-depth/
Posted on January 28, 2013.
[6] Eduardo
Guimaraes. Las redes sociales y el fin
del modelo top down de comunicación de masas. Ponencia presentada en II
Taller Internacional “Las redes sociales y los medios alternativos, nuevo
escenario de la comunicación política en el ámbito digital”. La Habana , febrero 2013. En_ http://www.ventanapolitica.cu
[7] Pascual
Serrano. La batalla de la izquierda y
las redes sociales En_ http://lapupilainsomne.wordpress.com/2013/02/13/la-batalla-de-la-izquierda-y-las-redes-sociales/
[8] Citado
por Rivière, Margarita. La fama. Iconos de la religión mediática. Crítica,
Barcelona, 2009. En Pascual Serrano. La
batalla de la izquierda y las redes sociales En_ http://lapupilainsomne.wordpress.com/2013/02/13/la-batalla-de-la-izquierda-y-las-redes-sociales/
[9] Iroel
Sánchez, intervención en el espacio de debate Último Jueves, de la revista Temas,
noviembre de 2012 En._ Tania Chappi Docurro Último Jueves de Temas Navegar con cabeza propia (pfd).
[10] Juan
Fernández. intervención en el espacio de debate Último Jueves, de la revista Temas,
noviembre de 2012 En._ Tania Chappi Docurro Último Jueves de Temas Navegar con cabeza propia (pfd)
[11] Juan
Fernández. Intervención citada.
[12] Pascual
Serrano. La batalla de la izquierda y
las redes sociales En_ http://lapupilainsomne.wordpress.com/2013/02/13/la-batalla-de-la-izquierda-y-las-redes-sociales/
[13] Milena
Recio, intervención en el espacio de debate Último Jueves, de la revista Temas,
noviembre de 2012 En._ Tania Chappi Docurro Último Jueves de Temas Navegar con cabeza propia (pfd).
[14] Rosa
Miriam Elizalde, intervención en el espacio de debate Último Jueves, de la revista Temas,
noviembre de 2012 En._ Tania Chappi Docurro Último Jueves de Temas Navegar con cabeza propia (pfd).
[15] Rosa
Miriam Elizalde, ob cit.
[16] Rosa
Miriam Elizalde, ob cit.
[17] Disamis
Arcia. A los blogueros cubanos. http://letrajoven.wordpress.com/2013/01/28/a-los-blogueros-cubanos/
[18] Disamis
Arcia. A los blogueros cubanos. http://letrajoven.wordpress.com/2013/01/28/a-los-blogueros-cubanos/
Publicar un comentario