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- A 55 años del Moncada: ¿Los hijos de Matusalén están en Las Tunas?
• Cinco décadas y media después del Asalto al Cuartel Moncada la esperanza de vida en Cuba superó ya los 77 años, por encima incluso de varias naciones del llamado Primer Mundo; y una provincia que ocupa el noveno lugar en extensión territorial y menos del cinco por ciento de la población total del país, casi llega a los 80 años.
Cuando la Generación del Centenario asaltaba a los cuarteles Moncada y Carlos Manuel de Céspedes para iniciar la verdadera lucha revolucionaria contra la dictadura de Fulgencio Batista, los cubanos vivían como promedio 49.6 años y su edad se promediaba en 22.3 años; quienes habían rebasado los 60 años eran solo el 6.9 por ciento de la población en su conjunto.
“De acuerdo a estimaciones de la División de Población de las Naciones Unidas, Barbados y Cuba serán los países mas envejecidos de América Latina y el Caribe en la perspectiva inmediata”, dijo en su informe del 2007 la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE).
Razones tiene para afirmarlo pues el índice nacional de esperanza de vida ya llegó a los 77,7 años. La población de este archipiélago tiene como promedio 37.4 años, y los adultos mayores son aproximadamente 1,9 millones de personas, o sea el 16.6 por ciento del total. Todo lo cual indica que su incremento no puede atribuirse únicamente al crecimiento lógico de población en más de cinco décadas, sino a otros factores concernientes a las condiciones de vida de la gente.
Pero si examinamos los números al respecto de un territorio que prácticamente no existía en 1953 entonces los desinformados lo llamarán milagro.
Hoy los habitantes de la provincia de Las Tunas tenemos la mayor esperanza de vida del país: 79,28 años. Y, aunque resulta imposible establecer comparaciones exactas pues dicha demarcación administrativa surgió como tal en 1976, algo se puede hacer con los datos disponibles.
En los día en que Fidel Castro Ruz y el resto de los asaltantes conmocionaban al país y a la dictadura con su heroísmo, esta parte de la Isla formaba parte de la antigua provincia de Oriente, en la cual las personas que superaban los 60 años apenas eran 4,9 por ciento del total de habitantes.
De acuerdo con los datos más frescos de la Oficina Nacional de Estadísticas dicho porcentaje casi llega a 15 en las cinco provincias que hoy existen donde otrora estuvo una sola.
¿Cómo puede ser posible esto?
Avancemos un poco más en el tiempo.
Todavía en 1970 cuando daban los primeros resultados los planes de desarrollo de la Revolución, solo tenían la probabilidad de alcanzar los 80 años, 37 de cada cien cubanos. Por ese misma época 23 de cada cien defunciones afectaban a personas menores de 15 años; y la mortalidad infantil a pesar de que había podido ser reducida de los 69,9 por cada mil nacidos vivos que encontró el Gobierno Revolucionario al llegar al poder, todavía era de 38,5.
Tres décadas después menos del dos por ciento de las defunciones que lamentamos aquí, perjudican a los más jóvenes; y entre las 10 primeras causas de muerte en Cuba, Las Tunas solo supera la media nacional en la quinta y la novena.
Digno de destacar el hecho de que esas causas parecen más típicas de los calificados como países desarrollados que del llamado Tercer Mundo. También más del 78 por ciento de esas muertes ocurrieron en personas de 60 años y más.
En el otro extremo están los decesos atribuibles a enfermedades contagiosas, complicaciones relacionadas con la maternidad, perinatales o nutricionales. Según datos de la Organización Mundial de la Salud, solo el 7,9 por ciento de los fallecimientos ocurridos en Cuba entre 2001 y 2002 estuvieron asociados a enfermedades infecciosas y parasitarias, mientras que solo el 0,7 fue a causa de deficiencias nutricionales.
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) señala, por su parte, que todos los partos en Cuba son atendidos por personal calificado y que tanto la malnutrición infantil, como el bajo peso y talla para la edad, en menores de cinco años, solo afecta a menos del cuatro por ciento de los niños.
Entonces no se trata de que el bíblico Matusalén haya dejado su descendencia en esta o en alguna otra parte de la geografía cubana. Sino que la gesta del Moncada no fue en vano, solo fue el primer paso para que hoy podamos mostrarle al mundo estadísticas ilustrativa de cuánto ha significado esta Revolución para quienes vivimos en este archipiélago del Caribe.
Notas
1. Oficina Nacional de Estadísticas. Véase www.one.cu
2 Datos de los censo de 1953, véase en www.one.cu
3 Las diez primeras causas de muerte en Cuba son por ese orden: Enfermedades del corazón, Tumores malignos, Enfermedades cerebrovasculares, Influenza y neumonía, Accidentes, Enfermedades crónicas de las vías respiratorias inferiores, Enfermedades de las arterias, arteriolas, y vasos capilares, Diabetes mellitas, Lesiones autoinflingidas intencionalmente, Cirrosis y otras enfermedades crónicas del hígado
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