Posted by : Unknown lunes, 13 de junio de 2011


Decía hacerlo por el “desinteresado” propósito de “ayudar” a los cubanos, sin embargo las recientes revelaciones del The New York Times, combinadas con las evidencias presentadas por el gobierno de la Mayor de las Antillas, confirman las reales intensiones de EE.UU. de establecer sistemas paralelos de información para sus asalariados internos.

¿Solo un hombre en Miami?

Como “un servicio 911 para disidentes cubanos” lo describieron los voceros de la contrarrevolución cubana en Miami, refiriéndose a un recurso supuestamente creado por un graduado en la Universidad Internacional de la Florida (FIU), quien habría creado un blog que se nutriría con informaciones obtenidas desde Cuba mediante llamadas telefónicas. Este sistema habría empezado a funcionar desde el 14 de abril; sin embargo ahora es evidente que estamos ante la punta del iceberg de una estrategia mucho más amplia financiada directamente por el Departamento de Estado.

Hace poco The New York Times dio a conocer que en Afganistán, con el esfuerzo coordinado de funcionarios civiles y militares, Washington habría establecido lo que un alto funcionario describió como “una especie de sistema 911 que estará disponible para cualquier persona con un teléfono celular”. En este caso, para mantener en línea sistemas propios de telefonía celular que eludirían la actual capacidad de los talibanes de poner fuera de servicio las redes inalámbricas de las empresas afganas.

El Times neoyorkino aseguró que este Proyecto Palisades era parte de un esfuerzo mucho mayor de la Administración Obama para “crear una Internet a la “sombra” y sistemas de telefonía móvil utilizados por “disidentes” con el objetivo de minar gobiernos incómodos para Estados Unidos o acusados por la administración norteamericana de censurar o cerrar redes de telecomunicaciones”.

El propio rotativo detalló que “El Departamento de Estado, por ejemplo, está financiando la creación de sigilosas redes inalámbricas que posibilitarían a las personas que designe Washington comunicarse fuera del alcance de los gobiernos en países como Irán, Siria y Libia, según los participantes en los proyectos”.

Asimismo el periódico fue amplio en detalles sobre la más reciente creación del Departamento de Estado, quien valiéndose de la extraña mezcla de hackers y psicólogos estaría financiando “el proyecto del “grupo maleta”, basado en “la Red Inalámbrica Mesh”, una tecnología que puede transformar dispositivos de telefonía móvil o computadoras personales en una red invisible inalámbrica sin un hub centralizado. En otras palabras, voz, imagen o mensaje de correo electrónico puede saltar directamente entre los dispositivos inalámbricos modificados - cada uno en calidad de una célula de mini “torre”desde el teléfono - sin pasar por la red oficial”.

BGAN `s y Maleta: dos caras de una misma moneda

Cuando el 3 de diciembre de 2009 fue detenido en La Habana el contratista de la USAID Alan Gross, mientras distribuía equipos diseñados para establecer comunicación por Internet, más de un medio de comunicación extranjero se mofó de la denuncias de las autoridades del Archipiélago de que se trataba de una operación de Washington, para construir redes secretas de información.

Los cuestionamientos no se detuvieron ni siquiera con las evidencias presentadas en marzo de 2011 por el agente de la seguridad del Estado Cubana, Dalexi González Madruga un ingeniero en Telecomunicaciones que fue contactado por enviados de EEUU para organizar en Cuba redes informáticas ilegales para la transmisión y recepción de datos de manera codificada.

Tampoco lo hicieron cuando en abril de este año Raúl Capote, otro agente del G-2 cubano, le relató a la televisión de su país como en 2008 un diplomático norteamericano, James Benson, le entregó un BGAN, un aparato de telecomunicaciones que permite conexión rápida con Internet al margen de las redes gubernamentales, para garantizar “comunicaciones seguras” con sus oficiales CIA”. Casualmente Gross distribuía dispositivos similares a los presentados por Capote.

Un mes después la agencia AP daba a conocer la existencia de un servicio de mensajería controlado por la Oficina de Transmisiones a Cuba (OCB), bajo cuyo mando están Radio y TV Martí.

La OCB –afirmó su director Carlos García Pérez- habría despachado “al menos 25 mensajes de texto a usuarios de celulares en toda Cuba, incluyendo a figuras opositoras y cubanos de a pie.” Enviando “cuatro mensajes diarios mediante servidores para teléfono en línea como Skype, que no identifica al remitente, en este caso Radio y TV Martí”, dijo. Adicionalmente estarían preestableciendo este sistema de mensajería en los móviles de los cubanoamericanos le traen a sus familiares en el Archipiélago.

De manera que las revelaciones del Times simplemente confirman las muy bien fundamentadas denuncias del gobierno cubano. Al tiempo que hacen muy poco creíble la historia de la supuesta “filantropía” de un anónimo individuo para suministrar “desinteresadamente” información a los cubanos. Son demasiadas coincidencias entre los criterios y prioridades de uno y otro como para no pensar que estamos ante las ramas del mismo árbol subversivo e injerencista diseñado para derrocar a gobiernos.

En 280 caracteres...

Lo más leído

BlogoVentana

Con la tecnología de Blogger.

- Copyright © Cubaizquierda -Metrominimalist- Powered by Blogger - Designed by Johanes Djogan -