Cubaizquierda

Olvidé interrogarla sobre si ha escuchado un tema de Calle 13  que justamente aborda el complejísimo asunto de manifestar la manera de pensar, una cuestión que cuando se  afronta desde la dinámica de los masivos de comunicación en Cuba levanta más una suspicacia.

Sin embargo lo que sí se preguntó sin medias tintas la joven periodistas de Yelaine Martínez Herrera en su Trabajo de Diploma fue cómo y sobre qué se opina en la prensa cubana contemporánea o si se habla de temas que le interesan a la gente.

Aunque su investigación  se enfocó concretamente en el “Tratamiento periodístico de los principales objetos y atributos de la agenda pública en la página Criterios del Periódico 26 de Las Tunas durante octubre 2011 y febrero 2012”; obtuvo interesantes conclusiones sobre la salud de un género importante para mantener a la prensa doméstica como un referente para los públicos.

“La prensa, con el afán de informar, educar y movilizar a las masas, no debe estar distante de las vivencias del pueblo, máxime si es el principal protagonista de cada cobertura. Solo así podrá cumplir con sus funciones en la sociedad y satisfacer las necesidades de sus receptores”, dice.

Al mismo tiempo deja bien claro que si bien  “con el triunfo de la Revolución se estipuló que el periodismo en Cuba estuviera al servicio del pueblo trabajador, de sus necesidades e intereses. Sin embargo, investigaciones anteriores sobre la relación entre medios y públicos demuestran que persiste una brecha significativa entre objetos y los atributos que conforman la agenda pública y aquellos que forman parte de la agenda mediática”.

Subraya en una de sus conclusiones que “los periodistas no aprovechan todas las potencialidades del género comentario -que es el más utilizado- y esto repercute en el logro de la persuasión, la calidad del mensaje, la credibilidad y el aprovechamiento del espacio en función de la agenda pública”.

Tras concluir su exposición accedió a responder algunas interrogantes.

En tu tesis señalas, al menos lo noté así, una peligrosa disonancia entre la agenda de los públicos y la de la sección de opinión de 26, ¿crees que eso es un peligro en particular para los semanarios provincial y en general para la prensa del país?

(Yelaine) Es un peligro. No solo mi investigación, también otros estudios,  encuestas, análisis de contenido y los intercambios directos con la población dicen que a la prensa le falta mucho para acercar los intereses mediáticos a los del público.

Es un punto clave en todas estas investigaciones advertir la presencia de una  preocupación por preservar una imagen de las deformaciones de la prensa extranjera  y de la agresión mediática que sufre Cuba. Pero eso ha creado cierto recelo en los periodistas y de las direcciones de los medios de publicar con un matiz crítico temas que atañan directamente a la población, para que estas ideas no sirvan como arma para la contrarrevolución.

Por eso se le da preponderancia a temas de política nacional o internacional relativamente ajenos a la agenda pública por encima de los que le chocan directamente a la población como podrían ser los precios, la calidad de los productos o  el transporte en sus diversas aristas.

¿Por eso enfatizas que se ejerce la opinión desde una óptica de responsabilizar a la gente con buscar las soluciones por ejemplo la disciplina social y la higiene ambiental, más que exigirle cuentas directas a las instituciones?

(Yelaine)A veces nos quedamos en que no abordamos algunas temáticas, pero en ocasiones lo hacemos de un modo superficial o sin proponer soluciones. Es hacer análisis a los organismos pertinentes con nombres y cuando sea necesario.

¿Dónde crees que estaría la oportunidad que todavía tenemos para ejercer la opinión de una manera mucho más cercana a la gente?

(Yelaine)En primer lugar hay que buscar esos mecanismo internos que nos permitan saber cuáles son efectivamente las cuestiones que interesan a la población ya sea a través de los centros de Estudios Sociopolítico y de Opinión (CESPO) del Partido Comunista de Cuba (PCC), de los departamentos de Opinión de Poder Popular, de las cartas que llegan, realizar con más sistematicidad encuentros con los lectores. Es establecer ese contacto directo con la población aprovechando las potencialidades de los mecanismos existentes para saber lo que le interesa al público.